lunes, 2 de marzo de 2009

Sexo Gay Por Cam

Nos fuimos casi todo el mes de agosto ya que esa fecha cogemos las vacaciones, salvo unos días que nos reservamos para septiembre, para irnos de viaje. Abrí la puerta de casa sin pensar más en ello. . vivimos en un dúplex. . y tal como entré me encontré en el mueble del recibidor, dos copas de cava medio llenas, y una bolsa de deporte, que no había visto antes por casa . . Algún instinto se despertó en mí, y sin saber muy bien porque, cerré la puerta sigilosamente. El rostro de Martina refleja fielmente el placer Terra Chateo que la polla de Pacco le produce, sus gemidos y gestos provocan en Pacco un enorme placer. El sol penetraba en el aguamientras se iban produciendo cambios de luz por cada vaivén de ola que a suvez terminaba rompiendo en la playa. Bueno, les contaré una historia que me pasó, a raíz de que escribo relatos, estaba revisando mis correos, cuando vi uno que decía: saludos de calenita, en seguida abrí ese correo y empezaba por saludarme y decía que Sexo Gay Por Cam le había excitado mucho lo que yo hacía con mi pareja y me contaba que se llamaba Vanesa que era gordita, adicta al sexo, eso me interesó mucho porque es muy difícil conseguir mujeres que sean adictas al sexo. Ya se que debería de haber seguido pegándole por ser tan puta pero ya tenia lo que quería en mi mano y lo que quería eran las lagrimas de Webcams Portugal Belén. , algo gordito, de cabellos castanos y ojos marrones, pero hay algo que me atrae mucho de él, y es el hecho que es muy velludo por todo el cuerpo, demasiado para su edad; yo por el contrario no soy muy peludo aunque tengo lo mío, mido unos 180, peso alrededor de los 85 Kg. Quiero que los pelos de tu entrepierna me hagan cosquillas para luego depilarte, quiero arrojarte cera hirviendo de una vela roja, quiero ponerte hielo en los huevos, quiero lamer mermelada en tu pecho, quiero que me azotes, quiero que te limpies en Chat Webcams Gratis mi, quiero agotarte, quiero que te resbales al tocarme, por que tu sudor impregna todo mi cuerpo. Cuando me decidí, ya estaba dando gritos de placer y un orgasmo me inundaba como hacía anos que no lo hacía. Sabes, prosiguió el fetichista, al fin he sido capaz de consumar un viejo sueno: elegir a la reina integral de la belleza. Caí desplomado sobre él, nos besamos mientras me metía un dedo en mi culo presintiendo que yo estaba listo para acabar dentro de él.

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